La combinación de un descanso de calidad, ejercicio regular y alimentación saludable mejorará tanto tu salud física como mental, incluida tu memoria, y no sólo prevendrán la pérdida de memoria sino que también la mejorarán.
Dormir Bien
Una buena calidad del sueño durante la noche es un remedio fácil para mejorar la memoria. Asimismo, una pequeña siesta después de haber aprendido algo nuevo nos ayuda a retenerlo. Estudios recientes han demostrado que las personas que duermen durante ocho horas tras haber aprendido nombres y caras eran más capaces de recordarlas después comparadas con aquellas que no habían dormido. En el estudio del psicólogo Nicolas Dumay se determina que dormir bien no sólo protege nuestro cerebro de la pérdida de memoria, sino que también nos ayuda a retener mejor los recuerdos. Asimismo, una siesta de unos 45-60 minutos justo después de un nuevo aprendizaje potencia la memoria un 500%!!!
Realizar ejercicio
Otro de los pilares para la salud física y mental es el ejercicio. Nuestro cerebro depende del oxígeno para funcionar correctamente. Necesitamos un flujo de sangre rica en oxígeno que riegue el cerebro y el ejercicio mejora este flujo de sangre. Según últimos estudios, realizar ejercicio unas cuatro horas después de haber aprendido algo mejora más la memorización que realizarlo inmediatamente después, aunque todavía no se sabe bien por qué
Alimentación saludable
Las grasas saturadas, como las obtenidas de la carne roja y la mantequilla, están relacionadas con una memoria más pobre. Igual que el colesterol puede acumularse en nuestras arterias, también lo hace en el cerebro. Así lo explica la escuela de medicina de Harvard: “»La acumulación de placas de colesterol en los vasos sanguíneos del cerebro puede dañar el tejido cerebral, ya sea a través de pequeños bloqueos que causan accidentes cerebrovasculares silenciosos o un accidente cerebrovascular más grande y más catastrófico, que puede comprometer el pensamiento y la memoria «.
La dieta rica en grasas no saturadas y una dieta mediterránea con mayoría de vegetales, fruta, aceite de oliva, pescado, nueces, etc. se ha demostrado numerosas veces estar asociada a la mejora y a la prevención de memoria.